Yo no soy bonita

Yo no soy bonita

Cuando niña para mis adentros decía: “Yo no soy bonita”, por ello era tímida, callada y buscaba agradar y complacer a los demás.

Mi madre es una mujer sumamente atractiva, blanca, güera y de ojos azules, desde pequeña recuerdo como las personas admiraban su belleza; sin embargo cuando ella me presentaba con otros como su hija, la gente decía cosas como: Ay, no se parece a ti, uuuuy que pena que no sacó tus facciones tan finitas, caray no salió de ojo azul. Y aunque mi mamá no le daba importancia, yo por dentro me hacía chiquita, me entristecía y me enojaba por ser diferente.

Así que inconscientemente, prefería no ser vista, ni llamar la atención, básicamente buscaba pasar desapercibida. Y me salió muy bien, mis compañeros y maestros de primaria y secundaria casi no me recuerdan. Por otra parte con mi familia buscaba quedar bien con todo mundo y ser una buena niña, bien portada, educada y obediente. Creo que muchos años estuve un poco resentida y estreñida… 

Finalmente, un día crecí y me di cuenta de 3 cosas que te quiero compartir:

1.   La belleza no es un tema exterior, sino un valor que uno mismo se da, es decir el reconocimiento viene del interior, de lo que somos. Esto me quitó un gran peso de encima.

2.  Comprendí que cada uno somos diferentes, únicos e irrepetibles. Así que dejé de compararme y competir, así que empecé a compartir más. Por lo tanto ya no estreso por “cumplir un estereotipo social”.

3.   Me encanta ver a los ojos de la persona, esperando mirar su alma y el reflejo de la mía, esto hace que todos los “muros caigan”.

Esto me ha ayudado a  disfrutar más como soy y lo demás es lo de menos.

Te abrazo amorosamente ...